Historia

La peña que hoy conocemos como «La Amistad» nació hace 40 años en el seno de un grupo de amigos que formaban un equipo de fútbol: el Olimpiakos.

En el verano de 1977 se constituyó este equipo con 30 socios ilusionados por las distintas actividades que desarrollaban en torno al deporte, conformándose en esa época los primeros estatutos oficiales. El primer presidente de los inicios de la Peña La Amistad fue José Ruiz.

El «Olimpiakos» fijó su sede oficial en la Calle Las Boticas, en lo que hoy es la Vidriera del Duero. En ese pequeño lugar de encuentro preparaban los distintos actos que llevaban a cabo a lo largo del año, que aunque no eran muchos, lo que no faltaba eran ganas, dinamismo y mucha ilusión. Su indumentaria en aquellos difíciles inicios se componía de camiseta y pantalón azul celeste, chaleco blanquiazul y fajín y pañuelo rojo.

En 1979 se cambia la sede oficial del «Olimpiakos» y se fija en la bodega denominada «La Botica Vieja», en esos años acenagada de escombros y con mucho trabajo por realizar para hacer que este lugar se conformara como centro de operaciones. Y con el cambio de sede llega también el cambio de nombre, ya que es en ese año cuando el «Olimpiakos» pasa a denominarse «Peña La Amistad», aunque continúan con la organización y participación en distintos acontecimientos deportivos: Torneos de Verano, Campeonato Virgen de las Viñas,… Es en ese periodo cuando los socios de la peña, que por aquel entonces tenía 80 integrantes, tienen que ponerse manos a la obra y trabajar muy duro para conseguir que el subsuelo elegido como sede fuera adecentado lo más posible. Durante ese primer año se consigue desescombrar hasta los dos primeros arcos. Posteriormente se continuaron realizando trabajos en la bodega y se levantaron muros de piedra y arcos, siempre intentando conservar lo más posible la estructura original de esta construcción histórica.

Un año después, en 1980, la Peña La Amistad consigue formar una charanga que se compone de ocho músicos, y que en años sucesivos llegó a contar con más de veinte. En aquella época las mujeres y los niños se vestían con el traje de la Peña, y aunque no pertenecían como socios oficiales, participaban en todos los actos que se organizaban.
Una de las tradiciones que se recuperó y en la que participaban socios y no socios fue en el elaboración de la limonada con los ingredientes más típicos: naranjas, limones, azúcar, canela en rama y, por supuesto, el vino de la Ribera, con una receta que tuvo una gran acogida y que «La Amistad» sigue elaborando con notable éxito entre el público.

El punto más álgido de la Peña se puede datar en la década de los 80, un periodo en el que se llevan a cabo muchísimos actos y una época en que la Peña llega a conformarse de más de 100 socios. Sin embargo a principios de los 90 distintas razones hacen que la peña viva sus momentos más bajos; sólo la ilusión de unos pocos hizo que no desapareciera definitivamente. Dos años de puro declive en los que el desánimo hizo que no se participara en ninguna actividad.

Pero el tesón, la esperanza y la ilusión de cuatro socios: Domingo Andrés, Marcos Gil, Ángel Huedo y Julián Cano, hicieron que la Peña volviera a mostrarse igual que en sus mejores años. Con la ayuda de estos cuatro socios, sus hijos y amigos se consiguió que se integrara en el colectivo gente joven (con una media de 20 años de edad), dispuesta a trabajar y a colaborar con responsabilidad. El presidente que se hizo cargo de esta nueva etapa fue el veterano Ángel Huedo.

El año 94 supuso todo un punto de inflexión en la historia de la «Peña La Amistad». Época de cambios, cambios de mentalidad, cambios de actividades, periodo de muchas vicisitudes, de mucho trabajo y de muchos problemas que resolvían con voluntad y con muy buen humor.

Los cambios también se produjeron en la indumentaria, intentando buscar un atuendo más tradicional el traje de la Peña, que la sigue identificando, se compone de pantalón negro, camisa blanca, chaleco granate y negro y faja de color rojizo apagado.

Los recursos económicos de la Peña en la mitad de los 90 eran realmente bajos, y para sufragar los gastos celebraban a lo largo del año distintos conciertos de música alternativa. En aquellos años toda ayuda era poca y la Peña que más colaboró en esos difíciles «nuevos inicios» fue «La Ribera». Ellos enseñaron a los músicos de la charanga, ensayaron y colaboraron en todo lo que pudieron. En la actualidad la charanga de la «Peña La Amistad» se compone de 20 músicos, a los que en absoluto les falta calidad en la interpretación de su variado repertorio.

Afortunadamente los malos años pasaron y hoy la peña presume de contar con la media de edad más joven de todas las peñas de Aranda de Duero, una media que se aproxima a los 35 años de edad. Otro de los hechos de los que se enorgullece es de ser la primera en Aranda que se constituyó como Asociación Taurino Cultural.

Y con los nuevos tiempos las energías se renuevan, y con ellas las ganas de realizar nuevas cosas. Así las obras en la bodega se reiniciaron en la primavera del 2001 abriendo la nave conocida popularmente como «Del Moca», concluyendo los trabajos en el 2002.

Pero cada año y con el inicio de la nueva era, la «Peña La Amistad» ha ido evolucionando en cuanto al número de actividades, ya que aparte de las que desarrolla durante las Fiestas Patronales en Honor a la Virgen de las Viñas, organiza el ya tradicional “ San Queremos “ fiesta que se hace normalmente a finales de Abril y en la que se da oportunidad de tocar a grupos musicales fundamentalmente de Aranda y La Ribera a parte de un montón de actividades para niños y mayores, y desde hace diez años también se viene organizando la “Fiesta de las cabecillas” que consiste en una cena popular para todo el que quiera, que tiene como plato fuerte las tradicionales “cabecillas” de lechazo asadas que tanto se han consumido siempre en nuestra tierra. Ésta es una cena con carácter benéfico en la que se dona todo el dinero recaudado a una asociación, y en la que de momento en todas las jornadas celebradas el lleno ha sido total. Hasta la fecha de hoy ya se ha colaborado con varias asociaciones arandinas y esperamos poder seguir colaborando muchos años más con todas las que podamos.

Pero «La Amistad» también intenta recuperar tradiciones ancestrales, para ello en diciembre llevan a cabo la Fiesta de la Matanza en la que colaboran todos los socios intentando aportar su sabiduría popular.

Los objetivos de la Peña siguen siendo mantener vivas las viejas tradiciones, sin olvidarse de las nuevas tendencias culturales, intentando además inculcar el respeto por las históricas bodegas de Aranda.

Cuarenta años de historia, con sus episodios buenos y malos, sus momentos de vicisitudes; es una pequeña gran historia que los socios se encargan de que cada día, cada mes y cada año se escriba un capítulo lleno de momento intensos, originales e irrepetibles, pero siempre entre amigos.

Peña Taurino-Cultural de Aranda de Duero dedicada a fomentar y animar las Fiestas Patronales de Aranda de Duero así como otro tipo de actos culturales y tradicionales de nuestra villa.